Hace días que me empeño en encontrar algo con que -para variar- hacerte sonreir. Ayer vi la síntesis de la profunda autocrítica procesada por la dirigencia frenteamplista en su meeting weekendiero y pensé en publicarla sin comentarios. Después me arrepentí, porque a más de cuatro no le haría gracia, es más: en una de esas, en vez de reir te hago llorar. Vos ves.
"La coalición de izquierda evaluó su desempeño en las elecciones municipales. Concluyeron que no alcanza con gobernar bien para ganar... (1)
Pero Dios premia las buenas intenciones, y hoy me hizo llegar a esta noticia (2)
Por favor, lee hasta el final.
Festivales "diferentes": Desde penes gigantes hasta excrementos de alce, la gente celebra casi cualquier cosa. Algunos de los festivales más extraños del mundo:
Festival de la Caída del AlceTalkeetna, Alaska Julio 2010
En esta celebración bastante asquerosa, la gente se tiran defecaciones de alce metidas en globos y quien resulte más recubierto gana un premio de 1.000 euros.
También hay música en vivo, deportes y joyería de estiércol de alce. Si vas, cuidado donde pisas!
Cada otoño Montana inaugura el mayor festival relacionado con los testículos. Se reúnen 15.000 fans de las gónadas, donde pueden probar las bolas de toro, empanadas y marinadas en cerveza. El Festival del Testículo no es un evento familiar, y todos los asistentes deben ser mayores de 21 años de edad. Advertido quedas que durante estos dos días de locura grotesca, no sólo son de toro los testículos que se dejan ver.
Festival del Pene - Kanamara Matsuri Kawasaki, Japón Abril 2011
Imagina un pene de madera gigante de 2,5 m de largo portado sobre los hombros de habitantes locales, mientras es adorado por multitudes. Pues eso es exactamente lo que sucede en este festival anual de la fertilidad sintoísta celebrada en Kawasaki cada primavera. Todo lo que se ofrece está relacionado con “nuestro querido amigo”: dulces con forma de pene, falo-llaveros e incluso vegetales tallados con sugerentes formas.
Nota: El Festival del Pene no debe confundirse con el Hadakamatsuri o Festival delHombre Desnudo, una festividad diferente, donde tocar al único que va totalmente desnudo y escondido entre la muchedumbre, otorga buena suerte y felicidad.
------------------------------------------------------------------------------------------
En las épocas que iba a Seminarios de Márquetin aprendí lo de las campañas globales con toque local. Está bien que fue hace tanto que las conferencias eran en blanco y negro (algunas hasta hubiera sido mejor que fueran mudas); pero hay cosas que no pierden certitud con el paso del tiempo.
Antes de eso, había observado el fenómeno japonés y el éxito monumental de una receta simple: copiar bien. Tras leer la nota, propongo una síntesis de ambos preceptos marquetineros: ser humildes y copiar lo bueno, siempre con un touch oriental (del Uruguay, of course).
Así, podríamos organizar un Festival como el de los renos, pero no para sustituir sus exóticas excretas por la vieja y criollísima bosta sino por tandas de campaña política. El público premiaría el mejor ejemplar de bostazo con el... no mejor pienso otro nombre para el trofeo.
Otro que podríamos adaptar sería el de Kawasaki, sustituyendo el falo gigante de madera por uno con el modelo del monumento al Ejército, construído en papel maché hecho a base de declaraciones impositivas. Algunos iríamos en moto. También podríamos copiar el de Hadakamatsuri, poniendo a Marita, Mariano o Daisy (o el Cuqui, Analía y De Marco, tanto da) en medio de la multitud, e invirtiendo el desafío: al que le toca ver o tocar, se joroba.
Un tercero podría ser el IMMrama, donde en lugar de atunes (que acá no abundan) podríamos hacer torneos de tirar bolsas de basura. Hay vecinos que tienen una práctica que habría que dejarlos fuera de concurso. Para que los compañeros de Actos y Festejos no se estressen demasiado, se podría organizar una vez cada cinco años, diez días antes de las municipales. Pero no: nadie se daría cuenta de la diferencia. Mejor no. Los capitalinos deben poder disfrutar (más aún) el fruto de la esforzada tarea de sus autoridades y servidores turísticos y municipales.
Un cuarto ejemplo a seguir podría ser el de Clinton (Massachusetts, no Bill, aunque... bue, estarían siempre agotadas. Las entradas, digo.). En nuestro Rock Creek Lodge vernáculo (podría ser en el Penitente o Cañada del Brujo) expondríamos a un cierto número de oyentes a diferentes discursos de algunos Ministros y Ex Ministros de Cultura, y luego se tomarían las medidas del caso. Acá sí se puede dar el Premio de Oro (el trofeo es fácil de imaginar).
Lamento no poder completar los cinco ejemplos, pero no encontré forma de describir de un modo que se pueda leer en este Medio lo de un Festival cuyos ingredientes sean cannabis y echarse polvos de colores. Además, creo que el Pilsenró ya está patentado.
Espero haber contribuido a la causa del Turismo Receptivo y que se me reconozca y recuerde por ello bautizando con mi nombre alguno de los premios consuelo de los Festivales propuestos o colocando una placa en el baño de Caballeros del Edificio Santos.
SAVAP
(1) Fuente:http://www.observa.com.uy/actualidad/nota.aspx?id=97296&ex=26&ar=1&fi=16)
(2) (Fuente:http://www.portaldeamerica.com/index.php?option=com_k2&view=item&id=1212:10-festivales-diferentes&Itemid=13&lang=es)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario